Las artes Escénicas en las aulas del ERAM
Las artes escénicas son un espacio de expresión creativa y reflexión, en el que confluyen múltiples disciplinas y perspectivas. A lo largo de los años, se han consolidado como medio esencial para entender y transformar el mundo que nos rodea. A través de las palabras de algunos docentes del Grado en Artes Escénicas del ERAM, exploramos esta riqueza conceptual y práctica y cómo encontramos las artes escénicas en cada asignatura.
¿Qué papel juegan las artes escénicas en la interpretación de nuestro entorno?
Responde Xavier Bobés, docente de la asignatura “Teatro de objetos y marionetas”:
Las artes escénicas son un encuentro entre el arte de lo efímero, la poesía y la empatía. Creamos para generar vínculos entre las personas, nuestros imaginarios, nuestras emociones. El teatro de objetos nos presenta la posibilidad de darnos cuenta de que todo lo que sentimos y aprendemos a lo largo de la vida se manifiesta también a partir de todo lo que tocamos, todo lo que nos rodea. La sutileza de todo lo que pasa desapercibido en lo cotidiano se convierte en una metáfora teatral de una potencia infinita. Y a partir del juego entre cosas, materiales, acciones, cuerpo, espacio… invitamos al espectador a mirar, interpretar, comprender, desde unos ojos de niño, todo lo que puede convertirse en metáfora, y por tanto teatro.
¿Qué implica tener como oficio la interpretación?
Responde Alberto Díaz, docente de las asignaturas “Reproducción del comportamiento humano” y “Ámbito de creación II”:
El oficio del teatro es una carrera de fondo y, como intérpretes, el instrumento con el que trabajamos (y continuaremos trabajando toda la vida), es nuestro propio cuerpo. También, por tanto, nuestra voz, nuestra sensibilidad, nuestro imaginario, nuestras emociones… Yo entiendo el trabajo como un viaje desde nosotros mismos, pero que debemos ser capaces de expandir en infinitas posibilidades. Partir de nosotros para habitar otros cuerpos, transitar otras emociones, ampliar sensibilidades y multiplicar sus imaginarios. Y entrenar siempre por hacerlo todo como si fuera la primera vez, con curiosidad, honestidad, verdad y compromiso.
¿Cuál es el papel de la Escuela durante la formación de los estudiantes de GAE?
Responde Sílvia Escuder, docente de las asignaturas “Técnicas de interpretación de los lenguajes corporales”, “Ámbito de creación I”, “Entrenamiento actoral” y “Interpretación avanzada ante la cámara”:
Cuando termine su proceso de formación, el estudiante de teatro no habrá terminado el proceso que hará de él un actor. Necesita toda su vida para conseguirlo y ni así. Pero si la Escola (el aula) ha dado las herramientas para que sea un ser curioso, autónomo y apasionado, la Escola habrá cumplido. Habrá dado al mundo un ser capaz de desafiarle, de ponerle en cuestión y de hacerle evolucionar.
Hay que despertar conciencias. Y la Escuela que los forma también. Por eso, la formación en arte dramático debe ser muy rica. Está claro que un pedagogo puede tener un método que da más importancia al cuerpo que al espíritu o la palabra. O viceversa. Pero eso no tiene importancia. Depende de los gustos personales.
¡Debemos creer en la posibilidad de cambiar el mundo, aceptando de ser nosotros modificados!
La Escuela debe incitar al estudiante a buscar, a cuestionarse ante todo, a ponerlo todo en duda, para coger y echar ciertas ideas, para convertirse en un instrumento consciente que contribuya al enriquecimiento del arte y de la cultura.
¿Cómo se relaciona la dramaturgia con el público?
Responde Ferran Joanmiquel, docente de las asignaturas “AEA” y “Dramaturgia”:
Las artes escénicas tienen como proyecto hacernos de espejo. Un espejo colectivo, social y personal al mismo tiempo. La escena (el teatro, la calle, da igual) es el lugar donde la imaginación del público se entrelaza con la metáfora creativa para crear juntos un universo rico en imágenes. Estas imágenes pueden tomar forma de coreografía, diálogo entre personajes, partitura musical o vuelo libre de unos cuerpos y unas emociones que viajan a través del espacio vacío, soltándose de la barra de un trapecio para agarrarse a otro, en constante equilibrio, al límite de la cuerda floja para seguir representándonos.
¿Por qué se trabaja el discurso crítico fundamental detrás de las prácticas artísticas?
Responde Judit Vidiella, docente de las asignaturas “Expresiones de la cultura contemporánea” y “Trabajo Final de Grado”:
Un elemento clave en la formación y trayectoria profesional de las personas que se dedican a la creación cultural en el sector de las artes escénicas y performativas, es el de dotarse de un discurso crítico fundamentado. Tener un bagaje genealógico, teórico y metodológico extenso sobre las diversas aproximaciones a las producciones artísticas y culturales pasadas y presentes, ayuda a comprender, analizar y valorar las diversas prácticas y expresiones en relación con su contexto histórico, político, económico, social y cultural . Estos diálogos con prácticas artísticas, análisis de eventos sociales, y marcos teóricos y filosóficos, ayudan a dotarnos de referentes, discursos, herramientas y posicionamiento a la hora de poner en acción procesos de investigación y creación educativa basada en las artes .
¿Cómo ha evolucionado la concepción del teatro desde el s.XIX hasta la actualidad?
Responde Carolina Martínez, docente de las asignaturas “Teorías dramáticas I ”, «Teorías dramáticas II ”, “Técnicas de interpretación de danza” y “Dramaturgia Audiovisual”:
Hoy en día el campo de las Artes Escénicas incluye múltiples disciplinas: teatro (de texto, físico, de objetos, multimedia…), danza, circo, performance… Y sus usos también son múltiples, suponiendo una transformación no sólo individual (del artista y el espectador), sino también colectiva.
Desde que Wagner formuló a finales del siglo XIX su teoría de la obra de arte total, ésta sirvió como inspiración para los creadores escénicos del siglo XX y XXI, que dejaron de contemplar el arte escénico como una traducción escénica de un texto teatral, para percibir el hecho teatral como una suma de disciplinas artísticas en diálogo, siendo el intérprete una pieza clave.
Esta nueva concepción del teatro como síntesis de puesta en escena, dramaturgia, tecnología y arte actoral, permitió al occidente superar la crisis a la que se encontraba el teatro en el siglo XIX, constituyendo cuyo término después se llamaría teatro posdramático y que empezaría a convertirse en un arte que cuestionaría no sólo al individuo y la sociedad, sino también a sí mismo, percibiéndose como un fenómeno en constante (y necesaria transformación). Es precisamente con esta perspectiva global de lo escénico que se creó y articuló el Grado en Artes Escénicas del ERAM desde su nacimiento, con la idea de formar a los estudiantes con una visión 360º de la escena, dotándoles de las herramientas básicas de cada una de las disciplinas constitutivas del teatro que son esenciales para conocer este arte y poder después especializarse (o no) en un campo concreto del mismo.
¿Ha evolucionado a lo largo de los siglos la esencia de la interpretación?
Responde Xicu Masó, docente de las asignaturas “Ámbitos de creación II”, “Ámbitos de creación IV”, “Dirección escénica”, “Interpretación escénica” y “Trabajo final de grado”:
La esencia de lo que hacemos es la misma desde hace miles y miles de años. Los humanos tenemos la necesidad de contarnos historias unos a otros; para entendernos mejor, para saber quiénes somos, para celebrar, para pasar los duelos, para quemar demonios, para aprender cosas, para hacer memoria. Los que contamos podemos ser muchos o pocos, quienes escuchamos también. Podemos hacerlo junto al fuego o con alta tecnología, pero es la misma necesidad. Por tanto, lo más importante, en lo nuestro, es comunicar. Nuestro oficio es el de aprender a comunicar lo mejor posible, nuestro arte es el de hacerlo desde la belleza, en toda su amplitud y complejidad. ¿Por qué el teatro que se graba con cámaras es tan malo? Porque lo más importante, como he dicho, es el hecho comunicativo y lo que no saben grabar las cámaras es la energía que se produce entre lo que cuenta la historia y lo que la escucha, entre los que la bailan y los que miran , entre los que cantan y los que escuchan.
¿Cómo se aplica la pedagogía de Jaques Lecoq en las artes escénicas?
Responde Aïna R. Marès, docente de las asignaturas «Técnicas de interpretación de los lenguajes corporales”, “Ámbito I”, “Entrenamiento actoral” y “Dicción ”:
Las artes escénicas pueden transformar nuestro entorno y al mismo tiempo el mundo en el que vivimos. La escuela de artes escénicas es un espacio de prueba y error donde los alumnos/as pueden investigar y descubrir su propio lenguaje para, una vez salen al mercado laboral, transmitir su propia visión del mundo.
Este, pues, es el espacio ideal para equivocarse y aprender de los errores, donde adquirir las herramientas necesarias para saber estar en escena sin miedo, sin complejos, sin tics, sin vergüenzas, sin manías. A partir de los aprendizajes adquiridos, los alumnos/as obtienen más confianza, fuerza, energía, pasión, seguridad, lucidez, concreción en las acciones que realizan en escena.
Desde la pedagogía de Jacques Lecoq nos adentramos en un viaje a través de diferentes máscaras que darán herramientas al futuro actor o actriz para desarrollar su cuerpo en el escenario. La base, según Lecoq, es el trabajo corporal. El objetivo es crear una página en blanco para poder llenarla de la paleta de colores más extensa. Cuanto más encontramos nuestra propia neutralidad, más permeables podremos ser a la hora de crear personajes.
«Ningún actor o actriz entra en el escenario sin su cuerpo», decía Lecoq.
¿Cómo se aplica la danza en la enseñanza de las artes escénicas en el ERAM?
Responde Laura Alcalà, docente de la asignatura “ Técnicas de interpretación de la danza”:
La danza nos mueve el espacio y nos permite crear desde el cuerpo, desde el mundo de la materia y desde lo que ya existe. En esta asignatura trabajamos la interpretación y creación en danza con el objetivo de conseguir unas capacidades técnicas, físicas y sobre todo unas herramientas que sean extrapolables a la creación escénica sea cual sea el punto de partida. Trabajamos desde la práctica abordando teoría y metodologías de creación en danza que nos permitan mover, componer y escribir con una mirada espacial, matérica y poner en funcionamiento un cuerpo reflexivo, performativo y compositivo.